Podría decirse que la poeta valdepeñera Juana Marín es hiperactiva. Sin embargo, sólo es una muestra más del carisma y la labor incansable de la mujer castellano manchega. En su trayectoria destaca haber organizado las tres ediciones del encuentro poético Suburbia en diferentes ciudades. También ha colaborado en fanzines y ha escrito la plaquette La pandereta dijo…, de donde han salido unos preciosos poemas musicados que dan un paso más allá a su poesía sonora. Además, ha trabajado en la webserie Monster reality y ha publicado Algunas casas, algunas horas, su penúltimo poemario. Ahora acaba de aparecer El vertedero, su tercer libro, en la editorial castellano-manchega Lastura (lastura.es).
Para la elaboración de este libro, la poeta ha buscado convertirse en un ser anónimo que abandona su cuerpo y deja viajar a su alma para explorar el monstruo que configura nuestros días, y, por un momento, se instala “en el nombre de un hombre que le roba la vida a otro”. Aunque “todos queremos vivir, todos, dignamente”, la poeta nos enseña en sus páginas que, en realidad, esa dignidad no existe.
Como ente que genera arte, Juana Marín crea una columna vertebral. La llama vertedero y la pincha para afilarle las vértebras correspondientes. Después las estira y las empuja hasta el Mediterráneo, que abre la boca cuando le arrojan carne humana. Juana Marín prosigue su camino hasta los labios resecos donde habitan las personas refugiadas, allí donde “una mujer invisible pide que no la miren” mientras “fugaz como el dolor en las noticias, inútil como el llanto colectivo” tú te sumerges en tu propio vertedero. Desde allí seguirás viendo caer la miseria. Aunque algunas de las páginas escritas por la poeta te permitan creer en las personas, queda la idea de que estamos condenadas a permanecer en el vertedero.
La base de la columna vertebral que nos presenta Marín es el poema que abre el libro. A partir de ahí nacen otros, titulados con los versos del primer poema, para salpicarte con el tuétano del mal que apesta nuestros días. De esta forma, el índice se convierte en una sombra del primer poema. Entre ambos cuerpos, y de forma trepidante, nuestra mente dibuja algunas de las ácidas sensaciones de la existencia.
Tráiler del libro, elaborado por Susana Sánchez Herradón.
Antonio Maldonado Muñoz.
“El vertedero”, de Juana Marín. by Antonio Maldonado Muñoz is licensed under a Creative Commons Attribution-NonCommercial-ShareAlike 4.0 International License.
Acento Cultural, número 43, Mayo 2018, ISSN: 2386-7213.
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